EJERCICIO
PARA MEJORAR LA "CAPACIDAD-IMPULSO" DE LA PIERNA DE ATAQUE
EN EL ATERRIZAJE DESPUES DE LA VALLAᄉ
ᄃ
Este
ejercicio tiene una importancia (y un beneficio subsiguiente) muy
grande de cara a sensibilizar
y, sobre todo, potenciar
la capacidad
de la articulación que se apoya en el terreno después de haber
superado la valla y que, contemporaneamente, debe empujar hacia
adelante todo el cuerpo para la reanudación de la carrera. Es de
destacar que se quiere estimular en el atleta una "capacidad"
optima de la articulación en la fase de apoyo-impulso en el suelo,
después de la valla, pero no
entrenarlo para aumentar la amplitud del 1º paso
(que sería un error) según podría parecer derivarse de la
explicación del ejercicio a un lector poco entendido en carrera de
vallas. Se desarrolla con "caida"
en
el foso de salto de longitud (si estamos en el gimnasio, se puede
"aterrizar" sobre colchonetas). El atleta se coloca recto
sobre un banco de 50-60 cm. Delante del banco se coloca una valla de
84 cm. El atleta se deja caer después de la valla con la pierna que
"baja" (de ataque) con una acción similar a la de la
superación de la valla. Al contacto con el suelo, la pierna debe,
simultaneamente, reaccionar al impacto y, como en un "despegue"
de salto de longitud, proyectar el cuerpo en el foso. Obviamente, el
banco y la valla son situados siempre a la misma distancia (medida)
del foso y conviene medir el salto efectuado. Con la mejora de la
"capacidad" y, sobre todo, del gradiente de fuerza aplicada
en el "despegue", el salto se debe alargar.
Ejercicios:
5-6 saltos al foso, medidos.
N.B.- Qué debemos observar
para juzgar la calidad técnica de la ejecución del ejercicio.
En el impacto sobre el
terreno, la pierna debe dar la impresión de gran expresión de
fuerza, no doblándose en la articulación de la rodilla y
permaneciendo bien estirada. El pie hace una amortiguación muy
breve después de que toda la articulación se extiende, proyectando
el cuerpo en el foso. En el aterrizaje desde el banco se debe
"buscar" tierra bajo la pelvis.
EJERCICIO PARA LA MEJORA
DE LA VELOCIDAD DE PASO DE LA PIERNA DE IMPULSO
En
este ejercicio se trata de focalizar la atención del atleta (y el
beneficio del ejercicio) en la rapidez de ejecución del paso de una
valla de la pierna de reclamo, que
es la acción de máxima importancia para reducir el tiempo de vuelo.
Se colocan 5-6 vallas a altura reglamentaria (en el periodo invernal
se puede usar una altura de 1,00 m.) y a una distancia superior
-alrededor de 1,50 m.-, respecto a la de la carrera. El atleta parte
de la linea de salida y la 1ª valla está situada a distancia
normal, mientras las otras están colocadas con una distancia
interpuesta aumentada en 5 pies. Pasada la 1ª valla, se emplean 5
pasos, no a la máxima velocidad, concentrando
toda la atención
sobre la máxima
rapidez
en llegar a tierra lo
más cerca posible del punto de aterrizaje de la pierna de ataque.
Esta sucesión de los dos apoyos, 1º y 2º, después de la valla
debe estar cercana
en el espacio y, sobre todo, en el tiempo (ejercicio visto
desarrollar en Inglaterra a Colin Jackson
en agosto de 1990, que considero de máxima importancia). Puesto que
he medido personalmente las distancias, puedo decir que Clin Jackson,
durante la ejecución de este ejercicio, ¡aterrizaba con la 1ª
pierna a 1 m. de la valla y la segunda a 50 cm. de la 1ª! En la
ejecución de la pasada, Jackson hacia aterrizar muy velozmente la 1ª
pierna para obligar a una mayor velocidad también a la 2ª.
Variación
del ejercicio:
Para enfatizar la sucesión 1ª-2ª en el aterrizaje después del
ataque en un lapso de tiempo extremadamente breve, se pueden efectuar
también pasadas laterales a distancias más cercanas, manteniendo
siempre el concepto de los pasos, no a la máxima velocidad entre
las vallas y velocísima la pasada-aterrizaje de la 2ª pierna.
Ejercicio:3
x 5 vallas.
EJERCICIO PARA LA MEJORA
DE LA VELOCIDAD DE LA PIERNA DE ATAQUE EN EL ATERRIZAJE
Este
ejercicio se desarrolla con el mismo método, la misma altura y
distancia entre vallas que el utilizado para la pierna de reclamo. En
este caso, la atención está centrada en la acción de "zarpazo"
(de arriba hacia abajo y de adelante hacia atrás; griffé,
como
dicen los franceses) de la pierna de ataque en la bajada a tierra
después de la valla. Debemos
insistir con nuestro atleta para que aterrice lo más cerca posible a
la valla y,
de cualquier modo, lograr que el contacto con el suelo de la pierna
en descenso llegue detrás
de la linea vertical imaginaria "cadera-proyección de la misma
al suelo".
Ejercicio:
3 x 5 vallas.
EJERCICIO DE PASO
CENTRAL COMPLETO DE LA VALLA PARA LA MEJORA DEL IMPULSO DE LA PIERNA
DE PROPULSION (2ª) EN EL ATAQUE
Este ejercicio sirve para
desarrollar un "impulso" potente y, al mismo tiempo
rápido, en el ataque de la valla.
Se colocan varias vallas a
distancias crecientes, de manera que se obliga al atleta a "empujar"
siempre de modo muy potente para sobrepasar, con una técnica
correcta, las vallas que están siempre más alejadas. La altura de
la valla es reducida para permitir más tranquilidad a la acción del
atleta, puesto que nos interesa el impulso potente en "ataque"
de la pierna de impulso y no la altura de la trayectoria de vuelo.
Ejercicio:
3 x 7 (8-9) vallas, (91 cm.), a distancia entre 1ª y 2ª de 4 m.,
después 4,10 m./ 4,20 m./ 4,30 m./ 4,40 m. y así sucesivamente
hasta que el atleta, con un paso, logra superar la valla con buena
técnica.
N.B.- Qué se debe observar
para evaluar la correcta ejecución del ejercicio.
Nuestro atleta desarrollará
bien el ejercicio sólo cuando la superación de la valla sucede con
una dinámica discreta en toda la pasada. Cuando las distancias entre
las vallas son más largas, el atleta necesitará de saltos hacia
arriba y acabará por eludir la valla a distancia excesiva o se
parará.
EJERCICIO PARA MEJORAR
LA DISPOSICION DE CARRERA DESDE LA SALIDA A LA 1ª VALLA
Partimos
del presupuesto de que el ritmo de los 3 pasos entre vallas obliga
(el uso de 7 pasos está ya abandonado también por aquellas
escuelas, como la de la ex RDA, que lo han apoyado durante los años
pasados) al atleta a buscar
una rápida aceleración controlando, al mimo tiempo, la amplitud de
los pasos.Esto
porque, desde la salida a la 1ª valla tenemos 13,72 m. y,
considerando que el punto de "despegue" para atacar la 1ª
valla está a 2,00/2,20 m., se deduce que para realizar 8 pasos, el
vallista tiene a su disposición solamente 11,6/11,5 m. Por tanto,
no puede salir de los tacos y emplearse en los 8 pasos como si se
tratase de una carrera de velocidad, porque la valla que lo espera
pocos metros después le condiciona drásticamente la disposición de
la carrera. Para lograr velocidad rápidamente, deberá utilizar una
gran fuerza explosiva a la salida de los tacos, que se transformará
en fuerza elástica una vez adquirida
velocidad
(disminuye el tiempo de apoyo), pero, simultaneamente, habrá de
controlar la amplitud de los pasos en favor de una mayor frecuencia
de los mismos. El problema más importante, posteriormente, es
imprimir
fuerza y velocidad en los pasos de aproximación a la valla, sin
hacer avanzar excesivamente la pelvis.
Es evidente que atletas con características diferentes se emplearán
con precauciones personales distintas para adquirir velocidad y
situarse a una distancia óptima en el ataque a la 1ª valla
(2,00-2,20 m.). Diferentes cualidades de movilidad articular,
velocidad, fuerza, estautura, y sesibilidad personal del ritmo
producirán, consecuentemente, aproximaciones distintas de cara al
entrenamiento salida-1ª valla. Sin embargo, para todos debe servir
el principio de
controlar la amplitud de los pasos, manteniendo marcadas
manifestaciones de fuerza en los apoyos y la alta velocidad de
traslación de la pelvis.
He valorado mucho la solución
dada al problema por el inglés Colin Jackson, que describiré como
un posible ejemplo, puesto que también muchos otros vallistas de
gran categoría, americanos incluidos, realizan una acción similar
desde los tacos a la 1ª valla.
POSICION SOBRE LOS TACOS
DE SALIDA
Los
tacos de salida están situados a una distancia que está definida
por los técnicos de habla inglesa como "medium"
; en el caso de Jackson, en Loughborough, 59 cm. el 1º, 103 cm. el
2º. Cuando el atleta sale de los tacos para realizar una prueba de
vallas, "enseguida"
coloca ligeramente retrasada
la
pelvis (al mismo tiempo que, obviamente, en posición alta). Esto,
porque así, desde los primeros apoyos, asume una posición que lo
hace "elevarse" rápidamente. Esta es una necesidad
impuesta por la valla que ha de ser afrontada. Cuando por el
contrario, el atleta sale de los tacos para una prueba lisa de
velocidad,
"enseguida"
coloca ligeramente adelantada
la
pelvis (al mismo tiempo que elevada). Esto sucede porque en este caso
él no tiene la necesidad de tener que "levantarse"
completamente en los primeros apoyos, sino al contrario, como todo
sprinter, tiene la necesidad de "lanzarse" inclinado antes
de enderezarse completamente.
LOS OCHO PASOS DE
APROXIMACION A LA 1ª VALLA
REPRESENTACION VISTA DESDE
ARRIBA (Fig.5)
ᄉ
ᄃ
En el dibujo están reseñadas
en un único esquema las primeras huellas de Jackson durante una
prueba de velocidad lisa (esbozadas) y las huellas del mismo atleta
durante una prueba de vallas.
Se
comprueba inmediatemente cómo los apoyos del atleta en la prueba de
vallas están muy distantes de la hipotética linea (recta) que sale
de los tacos y llega a la 1ª valla, mientras que en la carrera lisa,
los apoyos están mucho más cercanos a esta linea imaginaria. Y esto
le ayuda muchísimo a realizar lo que habíamos dicho al inicio:
lograr velocidad, controlando
la amplitud de los pasos.
Se comprueba fácilmente, en efecto, que AC>AB y que CD>BE. Con
los apoyos laterales (respecto a la linea que une los tacos de salida
con la primera valla), el atleta libera mayor potencia si realiza un
paso más largo y después necesariamente lateral, que no en un paso
cercano a la linea imaginaria susodicha y que, con
la misma amplitud
lateral
de los mismos,
hará avanzar mucho la pelvis hacia la valla (1ª).
EJERCICIOS DE "RITMO"
PARA LOS 110 M. VALLAS
Se entiende por "rítmica"
la sensibilidad al ritmo, a la musicalidad de los tres pasos entre
las vallas y al intervalo de pausa producido por la "pasada"
de las mismas.
Hoy
en día ha de tenerse en consideración, como punto de enfoque para
una mejora del tiempo final de la carrera, casi exclusivamente tener
la capacidad de ser rapidísismo
en "pasar" la valla,
que equivale a decir el tiempo
de vuelo,
calculado desde el momento en que se despega del suelo el pie de
propulsión (2ª pierna), hasta el momento en que toca suelo el pie
de la pierna de ataque (1ª pierna) y la habilidad para controlar la
amplitud de los pasos entre vallas. Para medir el primer parámetro,
esencialmente para informarnos de las cualidad y posibilidad
expresiva de nuestro vallista, se utilizan las plataformas de Bosco.
Pero más allá de esto, tenemos otro parámetro para controlar y
mejorar con las sesiones de ejercicios de ritmo, la rapidez
óptima
de los pasos intermedios y, sobre todo,
su mantenimiento en los 3 ultimos intervalos,
donde notoriamente se puede producir un aumento del tiempo de
recorrido de los susodichos intervalos. El test del tiempo
de vuelo
no nos dice necesariamente que llegará primero a la meta en una
carrera de 110 m. vallas entre los varios obstáculos con que se
encontrará (como por otra parte, según mi parecer, cualquier otro
test para cualquier otra especialidad), pero nos da, seguramente,
indicaciones precisas sobre la posibilidad de mejora de cada atleta
en particular y nos puede dar sugerencias sobre hacia donde
encaminar, caso por caso, el entrenamiento técnico. Esto ocurre
porque el resultado final en al carrera "normal"-
equivalente a decir en competición- lleva consigo ajustes técnicos
de la expresión del pasaje tal vez en varias fases de la carrera,
que son distintas de aquéllas que el atleta en cuestión realiza en
un test con 5-6 vallas.
Los ejercicios para la mejora
de la sensibilidad rítmica en la realización de la carrera de 110
m.v. se pueden desarrollar de varias maneras que indico a
continuación:
1) RITMO CON DISTANCIAS
MENORES Y FIJAS ENTRE VALLAS
Se
realiza con 7-8 vallas a 8.50 m. o menos, altura reglamentaria y
salida
de tacos (1.00
m. para atletas no de alto nivel). Este ejercicio requiere grandes
dotes de coordinación y sensibilidad expresiva en el acto de
realizar los tres pasos rapidísimos para poder atacar a una
distancia suficientemente útil la valla siguiente, sin trastornar la
técnica de pasaje. Es un ejercicio realizado frecuentemente (así se
lee en las publicaciones y así lo han dicho en reuniones los
interesados), por los atletas estadounidenses.
Ejercicio:
3 x 7-8 vallas (1.06 m./1.00 m.) con salida
de tacos.
2) RITMO CON DISTANCIAS
MENORES, PERO CRECIENTES, ENTRE VALLAS.
Se
ejecuta este ejercicio con 7-8 vallas, siyuadoas a las siguientes
distancias: salida - 1ª vallas, distancia reglamentaria; depués,
8.70 m. entre la 1ª y 2ª / 8.80 m. entre la 2ª y la 3ª / 8.90 m.
entre la 3ª y la 4ª / 9.00 m. entre la 4ª y la 5ª / 9.14 m. entre
la 5ª y la 6ª y, posteriormente, siempre 9.14 m. Si queremos
enfatizar el control de la amplitud de los pasos en la aproximación
a la 1ª valla, podremos (ejercicio que he visto realizar por primera
vez a los alemanes -hombres y mujeres- de 110 m. y 100 m. vallas en
Formia) hacer colocar a nuestro o nuestra atleta las manos 10-20 cm.
más
allá de la linea de salida cuando
están sobre los tacos. De esta manera, el atleta es obligado todavía
más a controlar la amplitud de los primeros pasos.
Este
ejercicio sirve para dar la "sensación" de aceleración
al atleta que la desarrolla material y psicológicamente, porque
sabe, cuando está sobre los tacos, que tiene necesidad
(distancias
más cercanas) de contener la amplitud de los pasos más que en una
carrera de verdad (distancias reglamentarias), pero que podrá dar
desahogo a su velocidad una vez que haya pasado las primeras vallas
(distancias crecientes). Sobre la validez de este ejercicio he tenido
la confirmación en el stage con Jackson. Cuando el atleta realizaba
solamente el ejercicio "salida - 1ª valla", su "despegue"
sucedía a 2 m. de la valla y la "llegada" a 1.50 m. Pero
cuando Colin debía recorrer y superar 5-6 vallas, su "despegue"
antes de la 1ª valla era de 2.20 m. y la llegada a 1.40 m. y así
sucedía con las otras 4 o 5 vallas. En la primera modalidad (sólo
1ª valla), Jackson sabía que no era de importancia capital la
distancia de ataque y llegada y, por así decirlo, se "dejaba
ir", buscanso sólo la velocidad de ejecución del ejercicio.
Pero cuando había de superar más vallas, su
mente le
ordenaba contener drásticamente la amplitud de los pasos para poder
extraer una aceleración óptima, atacando cerca las vallas más
alejadas. Por tanto, los ejercicios de ritmo no pueden realizarse con
eficacia, a mi modo de ver, con
distancias
y altura de vallas idénticas a las de la prueba.
N.B. - Qué se debe
observar para evaluar correctamente la ejecución de los ejercicios
de ritmo y las eventuales mejoras en la ejecución.
Si el atleta resulta hábil
en el desarrollo de este ejercicio, veremos (midiéndole) que el
"despegue" y el "aterrizaje" en el paso de las
vallas, se estabiliza en medidas adecuadas después de la 3ª-4ª
valla.
3) EJERCICIOS DE RITMO
CON VALLAS MAS BAJAS, A DISTANCIAS CRECIENTES Y DISTANCIAS DE PRUEBA
También pueden ser
utilizados con buenos resultados, los ejercicios de ritmo con vallas
situadas a distancia reglamentaria pero de menor altura (1.00 m.) o
con vallas a distancias crecientes y altura menor en las primeras o
en todas las vallas del ejercicio.
Ejemplos:
A) Distancias crecientes
y vallas a 1.00 m.
Puesto
que la dificultad de mantener una aceleración progresiva y un rimto
constante desde la salida en adelante, en la prueba de 110 m. vallas,
depende
casi totalmente de la altura de la valla, puede
resultar más simple el aprendizaje y asimilación de las adecuadas
"sensaciones rítmicas", disminuyendo la altura de las
vallas de 1.06 m. a 1.00 m. y manteniendo, por ejemplo, las
distancias entre las mismas como en el ejercicio n. 2.
Ejercicio:
2 x 7-8 vallas a 1.00 m., saliendo
de tacos.
Distancias: 8.70 m. entre la
1ª y 2ª / 8.80 m. entre la 2ª y 3ª / 8.90 m. entre la 3ª y la 4ª
/ 9.00 m. entre la 4ª y la 5ª / 9.14 m. entre la 5ª y la 6ª y,
después, siempre 9.14 m.
B) Distancias crecientes
y vallas inicialmente a 1.00 m. (3-4) y después a 1.06 m. (5-6 y así
en adelante)
La
utilización de las 3-4 primeras vallas a 1.00 m. aumenta la
facilidad de actuar rapidísimos en "pasar" la valla
(disminuye el tiempo de vuelo, y toda la acción resulta muy
agresiva).
Las distancias crecientes logran también, en este caso, los
beneficios ya descritos.
En este ejercicio se focaliza
de manera especial la transferencia de la agresividad del tramo
inicial más fácil (1.00 m. x 3-4 vallas), en proseguir el ejercicio
con vallas a distancias y alturas constantes.
Hace
muchos años he visto un ejercicio de ritmo sobre toda la distancia
de la prueba, desarrollado bastante intensamente en el SNAL de Formia
por el finlandés Arto
Bryggare
(13"35).
El
atleta había colocado todas las vallas a las distancias
reglamentarias, pero las había dispuesto previamente a a la misma
altura, con el fin de poder llegar velocísimo a las primeras (91
cm.) e "in crescendo" (1.00 m.), llegar, desde cerca de la
mitad de la prueba en adelante, a las alturas reglamentarias (1.06
m.), buscando mantener la misma frecuencia de los pasos intermedios
y el mimso tiempo de vuelo. Este mecánico entrenamiento con vallas a
3 alturas diferentes, requiere gran agresividad y pericia en
controlar los pasos intermedios. Confirma lo que he dicho antes y que
es
la necesidad de volverse hábil
( incluso planteando el problema de manera más simple con vallas más
bajas)
en afrontar las primeras vallas con la máxima agresividad y
aceleración, buscando reportar los beneficios de un comienzo más
fácil, con disminución del tiempo muerto de vuelo, al resto de la
prueba.
Ejercicio:
2 x 8 vallas; las primeras 4 a 1.00 m. y la siguientes a 1.06 m.
Distancias:
Las
mismas del ejercicio precedente.
Salida de tacos.
C) Distancias y alturas
tipo competición
Para este ejercicio, que es
realizado por atletas de altísimo nivel, es necesario un dominio
absoluto de todos los movimientos a ejecutar antes, encima y después
de la valla, por cuanto se trata de mejorar una situación motriz ya
casi perfecta (puesto que la perfección en atletismo, según mi
parecer, no existe y todo es mejorable). Atletas que corren los 110
m. vallas en 13"20 o menos, han encontrado graves problemas de
control de la carrera en el primer tramo o el segundo, pero han
tenido la necesidad de efectuar automático -carente incluso de
errores pequeños- y constante, el ritmo entre vallas y segura la
interpretación total de la competición. En otras palabras, ellos
han tenido necesiad de trabajar con cincel, mientras nosotros debemos
trabajar todavía con martillo y escoplo.
Ejercicio:
6 - 7 vallas x 2-3 pasadas a distancias reglamentarias.
Salida de tacos.
Se
centrará la atención sobre aquello que hay que considerar de
extrema importancia de cara a la impostación rítmica de la carrera:
la rapidez de paso de la valla (fase de vuelo), tratando de
conseguirla siempre más breve, y el frenético ritmo de los tres
pasos intermedios. Es de importancia capital en este ejercicio, que
no tiene facilidades, la
máxima concentración nerviosa (que es obviamente importante también
en todos los otoros ejercicios técnico-rítimicos).
EJERCICIO DE RESISTENCIA
ESPECIFICA PARA BUSCAR MANTENER CONSTANTE LA RAPIDEZ DE LOS 3 PASOS
EN LOS ULTIMOS INTERVALOS DE LA CARRERA: 7ª-8ª/8ª-9ª/9ª-10ª
VALLA
Generalmente los tiempos de
recorrido de los últimos 3 intervalos en la carrera de 110 m.
vallas, tienden a subir en los atletas de no altísimo nivel y
siempre para todos hay una disminución de velocidad, en la parte
final de la carrera, que marca la diferencia entre entre los atletas
de altísima calidad.
Tabla 1
1ªV 2ªV 3ªV 4ªV 5ªV 6ªV 7ªV 8ªV 9ªV 10ªV 110m.
1986
CARISTAN 2,59 1,03 1,01 0,99 1,01 1,03 1,00 1,06 1,04 1,10 1,34 13,20
1987
FOSTER 2,60 1,03 1,01 1,00 1,00 0,98 1,01 1,04 1,05 1,07 1,41 13,20
RIDGEON 2,60 1,04 1,06 1,02 1,04 1,03 1,03 1,06 1,05 1,03 1,33 13,29
JAKCSON 2,60 1,05 1,06 1,04 1,01 1,04 1,03 1,05 1,06 1,05 1,39 13,38
1988
KINGDOM 2,55 1,05 1,01 1,00 1,00 0,98 1,00 1,00 1,03 1,02 1,34 12,98
JAJCSON 2,57 1,04 1,04 1,02 1,03 1,02 1,03 1,04 1,03 1,05 1,41 13,28
CAMBELL 2,60 1,06 1,03 1,00 1,00 1,02 1,02 1,05 1,05 1,12 1,43 13,38
CHICHKINE 2,57 1,06 1,04 1,04 1,03 1,05 1,04 1,04 1,09 1,10 1,45 13,51
RIDGEON 2,58 1,08 1,04 1,03 1,07 1,06 1,05 1,08 1,07 1,07 1,39 13,52
JARRET 2,58 1,07 1,08 1,04 1,07 1,05 1,04 1,06 1,06 1,10 1,39 13,54
MC
KOY 2,49 1,06 1,02 1,05 1,03 1,12 1,09 1,11 1,09 1,09 1,44 13,61
BLAKE 2,48 1,09 1,04 1,04 1,02 1,01 1,17 1,16 1,20 1,19 1,56 13,96
En
esta tabla de tiempos de recorrido de los intervalos entre las
vallas, publicado por la I.A.A.F. con ocasión de tres grandes
competiciones, se puede observar cómo la mayor diferencia entre los
atletas viene dada, más que por la velocidad entre las vallas, por
el "sostén", en las últimas vallas, de la velocidad en
recorrer los intervalos.
Es
pues necesario tratar, con ejercicios adecuados, de mejorar el
"mantenimiento"
de la rapidez de los 3 pasos en la parte final de la carrera de
nuestros atletas. Muchas veces hemos visto planes de atletas, también
italianos, que proponían como ejercicio para consolidar este
"mantenimiento"
una serie, a veces también muy numerosa de repeticiones, sobre
distancias correspondientes al uso de 6-7 vallas y no obteniendo los
resultados esperados. Conviene hacer notar que el esfuerzo que se
produce corriendo la distancia de la salida a la 7ª valla (68.5 m.),
para desarrollarse tiene necesidad de una fuente energética (el
tiempo empleado gira en torno a 8"70/8"80 con cronometraje
eléctrico), que
no es la misma
que para la prueba de la carrera total, en la que se vienen empleando
alrededor de 13".
Por tanto, la
resistencia específica al "final de la prueba" se puede
lograr sólo con una distancia a recorrer igual o, mejor, superior a
la misma.
Es inútil correr 30 veces con
las 6 primeras vallas; conviene correr con 10-11 vallas, para
entrenar la resistencia específica de cara al final de la carrera.
Ejercicio:
2-3
x 110 m. con 10-11 vallas. Si queremos facilitar la tarea, podemos
bajar las 3 últimas vallas o acercarlas ligeramente, para conseguir
mantener constante la
rapidez
de los pasos.
También:
Las series con distancias de
recorrido que aumentan, dan quizás resultados más fructíferos en
el periodo preparatorio precompetitivo, mientras las series con
distancias que disminuyen, permiten al atleta conservar mayor
"frescura" de ejecución, ya física ya mental, en todas
las repeticiones.
Periodo
preagonístico: 1
x 4 / 1 x 6 / 1 x 8 / 1 x 11 vallas con la 1ª a 8.80 m. de la 2ª,
la 2ª a 8.90 de la 3ª, la 3ª a 9.00 m. de la 4ª y luego a 9.14 m.
Periodo
agonístico: 1
x 10 / 1 x 8 / 1 x 6 / 1 x 4 vallas con las mismas distancias.
Como
de costumbre, las distancias más cercanas sirven para mejorar la
sensibilidad
para la aceleración en la carrera entre las primeras vallas.
EJERCICIO PARA EL
CONTROL DE LA EXACTA DISTANCIA DE ATAQUE Y LLEGADA EN EL PASO DE LA
VALLA
Necesariamente debemos pensar
también en controles que nos permitan verificar, mediante un
determinado ejercicio, la adqisición al menos de la habilidad
técnica ejecutiva de las varias expresiones de la carrera,
requeridas para la alta cualificación. Personalmente he elaborado un
sistema muy simple, pero rigurosamente válido, de preparación del
test de control, experimentado la primera vez en 1971 dentro de los
test preparados para mi tesis ante el ISEF, que no requiere el uso de
instrumentos particulares o sofisticados, no siempre disponibles en
un lugar de entrenamiento normal.
Se
aplica con el uso de rayas de medición a varias distancias, antes y
después de la valla, a 10 cm. de separación una de la otra, de una
longitud de 100 cm. y una anchura de 10 cm., tal que pueda ser bien
visible en una filmación que eventualmente haremos. Las rayas,
puesto que la pista es normalmente de color rojo, se pueden hacer de
color blanco (con yeso, harina o papel). Para la medición inmediata,
durante el trabajo (las indicaciones vienen dadas por las señales
dejadas por los clavos de las zapatillas); se puede utilizar el
papel
normal adhesivo de los chapistas,
haciendo tiras más largas y cercanas para tener la certeza de que
los clavos (anteriores o posteriores), dejan huella.
Este método es seguramente
más preciso respecto al de señalar con yeso, por ejemplo, los
puntos donde, visiblemente, nos parece que nuestro atleta ha
abandonado el suelo antes de la valla y donde ha aterrizado después.
Este control nos dice a qué nivel técnico ha llegado nuestro atleta
que, a mi parecer, ha mostrado en buena medida la rapidez en pasar la
valla que,
a
su vez, ¡¡está
influenciada, fundamentalmente, por la distancia desde la que se
ataca la valla y aquélla dentro de la que se aterriza!!
(la distancia para completar el vuelo). Una vez que hayamos
establecido cuales son las distancias mejores de ataque y de llegada
para nuestro atleta, podemos destacar las tiras que la delimitan,
aplicándole un color diferente de las otras (por ejemplo, todas
blancas y las que queremos destacar, rojas).
De esta manera, después de
haber filmado la acción, es fácil, mirándola sobre la pantalla,
controlar los errores. Además, el atleta, al efectuar el ejercicio,
se dará cuenta (visión periférica) rápidamente si ha respetado
las distancias justas o no y su posición en ataque y en la llegada
será corregido rápidamente. Sobre todo, en la bajada de la valla.
EJERCICIO PARA EL
CONTROL DE LA TRAYECTORIA SEGUIDA POR LAS CADERAS EN LA CARRERA ENTRE
VALLAS Y EN EL PASAJE DE LA BARRERA
Hemos dicho que es muy
importante que el atleta mantenga, lo más posible, constante la
trayectoria de las caderas antes, encima y después de las vallas;
esto para lograr que el cuerpo siga una trayectoria rectilínea sin
altos ni bajos, que no comprometa la velocidad (aumento del espacio a
recorrer). Para controlar esto, basta colocar una fila de vallas en
sentido perpendicular a las utilizadas por el atleta en su carrera y
a la misma altura, de manera que haya una alineación de las tablas,
que formarán como una linea contínua blanca y negra, a lo largo de
la cual observaremos la trayectoria de las caderas del atleta. Para
el caso puede servir una cinta estirada a la altura de las vallas o,
como en la fotografía que muestro como ejemplo, una eventual
barandilla al borde de la pista.
EJERCICIO PARA EL
INCREMENTO DE LA VELOCIDAD DE LOS PASOS
(CARRERA EN BAJADA)
Las pruebas de carrera veloz
con el tramo inicial en bajada, inclinación del 3-4%, permiten al
atleta alcanzar picos de velocidad y frecuencia de los pasos no de
otra manera asequibles si no es con métodos e instrumentos
extremadamente sofisticados y que difícilmente se encuentran (tunel
de viento, aparatos con gomas que arrastran a los atletas, etc.).
Estas pruebas de
"supervelocidad" tienen un gran valor desde el punto de
vista de la adaptación neuro-muscular del atleta a frecuencias y
velocidades inusitadas, porque le obligan a tener bajo control, una
vez "lanzado", movimientos rapidísimos de las
articulaciones que le imponen también precauciones en las posiciones
de carrera para mantener en equilibrio la masa corporal durante
apoyos con tiempos de contacto muy breves. El acondicionamiento al
equilibrio y a la coordinación que de deriva es notable.
Este ejercicio debe
considerarse aplicable preferiblemente a atletas de alto nivel,
requiriendo gran madurez y capacidad de control neuro-motor.
Ejercicio:
4
x 80 m. con los primeros 30-40 en bajada (3% - 4%), y mantener en la
segunda parte de la distancia a recorrer la supervelocidad adquirida
inicialmente. Recuperación completa tras las repeticiones.
DISTRIBUCION EN EL CICLO
ANUAL DE TRABAJO DE LOS EJERCICIOS DE TECINCA ESPECIFICA DEL PASAJE
DE LA VALLA
Los
ejercicios dirigidos a la mejora de la cinética global del paso de
la valla, se realizan de manera masiva (léase
diariamente)
en los primeros meses de la preparación invernal.
En
el periodo que precede a las competiciones indoor (ver programa anual
de trabajo de Bertocchi en 1991: 13"69, Volturara en 1992:
13"69), se disminuye la cantidad de los ejercicios segmentarios
(ejercicios a 1 paso) y disminuyen los trabajos técnicos para dar
paso a los ejercicios a 3 pasos y ejercicios globales, donde se
buscará más la velocidad
de ejecución
que la "calidad" de la misma. El trabajo técnico
específico (por ejemplo, dirigido a corregir errores concretos),
será reanudado después de las competiciones indoor, en la fase de
transición, antes de las competiciones al aire libre. Todos los
ejercicios a un paso serán normalmente abandonados de abril en
adelante, a no ser por exigencias particulares. Es evidente que la
cantidad de ejercicios por sesión de entrenamiento y el
mantenimiento de aquéllos escogidos, según las necesidades de
nuestro atleta en los diferentes periodos de preparación y
agonísticos a lo largo del año, dependerán también de las mejoras
obtenidas, con ventaja tal vez de otros sectores del entrenamiento
(fuerza, destreza, etc.). Hago notar que es muy frecuente que los
atletas, también los de buen nivel, tienden a preferir los
ejercicios técnicos en los que "están mejor", frente a
áquellos en los que encuentran dificultad. En estos casos dependerá
de nuestra profesionalidad y capacidad personal para hacer comprender
que la dificultad de ejecución en un ejercicio segmentario es
síntoma de impericia técnica mucho más evidente por cuanto no es
visible en la ejecución global donde el
particular error puede escaparse por las acomodaciones que el atleta,
incosncientemente, introduce en el acto para superar esta deficiencia
técnica suya.
Deberemos convencer a
nuestro atleta de que son precisos ejercicios técnicos en los que se
encuentra dificultad, que darán mejoras importantes, una vez
superados.
En el periodo de competiciones
los ejercicios técnicos quedan subordinados a ejecuciones siempre a
gran velocidad, tipo competición.
EJERCICIOS PARA LA MEJORA
DE LAS CUALIDADES PRESTATIVAS GENERALES DEL ATLETA
(POTENCIAMIENTO
GENERALIZADO)
Puesto
que cuanto hemos dicho hasta ahora esté referido a atletas de alto
nivel, debemos, necesariamente, dar por descontado que el atleta
había ya superado, en los años precedentes de preparación, los
diferentes escalones de la preparación general, encaminados a
mejorar la funcionalidad de los diversos sistemas de su organismo
(cardio-circulatorio, respiratorio, esquelético, etc.). Permanece,
obviamente, la tarea constante de mejorar y recuperar más
eficazmente, mediante prestaciones siempre más sofisticadas y
difíciles, un cuerpo que está ya formado por años de trabajo, para
ser siempre más competitivo. Cuando hablamos de trabajo "general",
de acondicionamiento físico, hacemos referencia, por ejemplo, a
ejercicios de musculación para los sectores que consideramos
carentes o para reequilibrar deficiencias. Tomemos en consideración
el cross, los ejercicios de movilidad y extensibilidad muscular, el
trabajo en el gimnasio.
1) Cross
Con variaciones de velocidad,
sobre terreno con trechos en cuesta y en llano, a velocidad
constante, variada, en series fraccionadas.
Objetivo:
mejora de la funcionalidad fisiológica de diversos órganos y de la
resistencia orgánica general.
A
mi parecer, el cross tiene otro importantísmo significado que es el
de habituar
al atleta a sufrir en
el entrenamiento. No es raro el caso de atletas que no soportan
cargas de trabajo que juzgamos fatigosas y estresantes a nivel
nerviosos que se resisten frecuentemente a hacer trabajo de cross.
En consecuencia, salta a la
vista el gran beneficio de un positivo acondicionamiento psicológico
al trabajo, a la fatiga prolongada en el tiempo, a soportar estados
de momentanea dificultad como con frecuencia sucede en una prueba de
cross. Por otra parte, las pruebas de cross, mejorando las funciones
cardio-respiratorias, nos darán la base para poder desarrollar
buenas cargas de trabajo específico en los sucesivos ciclos de
preparación. Puesto que estamos hablando de atletas de 110 m.
vallas, no se necesita recorrer grandes distancias.
Ejercicio:
A)
Cross largo:
(al comienzo de la preparación invernal), 3-4 km. a ritmo suave,
sobre terreno variado.
B)
Cross corto:
(diciembre-enero) sobre distancias de 2-2,5 km. con aceleraciones y
desaceleraciones.
C)
Cross en series fraccionadas:
(diciembre-enero) sobre distancias de 500-600 m. x 4-5 repeticiones,
a ritmo suave (que resultará ordinariamente más rápido con
respecto a la carrera contínua).
2) Ejercicios de
movilidad articular y extensibilidad muscular
Es
notorio para todos que una buena capacidad de amplitud aticular y
otra tanta buena capacidad de extensibilidad muscular, ayudan al
atleta en la "economía" de energía precisa en un
movimiento dado o en el acondicionar positivamente el uso de la
energía requerida para desarrollar el movimineto analizado. La
extensibilidad
de los músculos es una capacidad neuro-muscular
que influye, unida a vínculos mecánicos derivados de la disposición
anatómica de sus propias inserciones óseas, en la
amplitud articular.
Con
el stretching
y con los ejercicios con movimiento activo
es posible intervenir, con evidentes mejoras, sobre la posibilidad de
ampliar la movilidad articular, aumentando la eficiencia del aparto
tendinoso y de los efectores musculares, con el consiguiente ahorro
de la energía requerida para el movimiento que influye en la
articulación afectada.
El vínculo mecánico a la
amplitud articular, formado por las inserciones tendinosas sobre los
huesos, no es modificable de manera significativa si no se actúa
sobre la extensibilidad del músculo interesado en la susodicha
inserción. Es muy importante al hacer ejercicios de stretching, la
participación "mental" del atleta. Conviene, en otras
palabras, que el atleta esté sensible a los movimientos del propio
cuerpo, hasta el punto de sentir casi físicamente el músculo que se
estira durante el ejercicio. Esto porque es, seguramente, la
posibilidad por pate del S.N.C. de reclutar en número mayor o menor
las fibras del músculo y "ordenar" la relajación con
estímulos nerviosos más que mecánicos.
3) Trabajo generalizado
en el gimnasio
Especialmente en el periodo
invernal, en los primeros meses de preparación, el trabajo de
fortalecimiento general tiene como su lugar elegido un emplazamiento
como es el gimnasio, que, por otra parte, ayuda al atleta a apartar,
durante los primeros meses de trabajo invernal, la mente de la pista
y de los trabajos bastante reiterativos a ella relegados.
En
el periodo inicial de la preparación son, según mi parecer, muy
aptos para un potenciamiento orgánico general de un atleta
vallista-velocista
algunos juegos deportivos, juntamente con todos los ejercicios con
autocargas o con sobrecargas. Este trabajo puede durar hasta enero
(comienzo de las competiciones indoor).
4) Fútbol de 5 contra 5
(máximo 6 contra 6)
El número de jugadores
depende, obviamente, de las dimensiones del espacio a cubierto. En el
caso de mis atletas empleamos un gimnasio de 35x25 m. con porterías
de balonmano y jugamos 5 contra 5, portero incluido, (los jugadores
se alternan en la portería o el portero es un atleta de otra
especialidad), de manera que los atletas que corren en el campo son 4
contra 4. Es una actividad deportiva muy motivante si es jugada con
ritmo de carrera elevado, como siempre ocurre, dada la rivalidad que
brota entre los dos equipos. El partido-entrenamiento conlleva una
excepcional sesión de fortalecimiento orgánico general (aparato
cardio-circulatorio, respiratorio, etc.) y específico para el tren
inferior. Al atleta le son requeridos contínuos y repentinos cambios
de dirección, el uso de destrezas musculares poco utlizadas en el
entrenamiento ordinario como es el caso de los driblings, inversión
de la carrera, elevado empeño de coordinación motriz en el control
del balón en carrera y en la parada del mismo, gran empeño
neuromuscular en golpear el balón y en saltar para golpearla de
cabeza.
El partido en condiciones
reducidas no ofrece momentos de pausa en el terreno, porque las
dimensiones reducidas del mismo "obligan" al atleta a estar
siempre "en juego". Esto aumenta el requerimiento de
agresividad por cuanto todos los jugadores son al tiempo atacantes y
defensores, por lo que la participación es total y contínua.
Estos partidos tienen gran
valor en potenciar las dotes de resistencia, también "mental",
a la fatiga. El deseo de jugar y ganar hace "sentir" menos
la fatiga e impulsa a resistirla más tiempo.
Ejercicio:
30´-
40´al final del entrenamiento, en los meses de
octubre-noviembre-diciembre, cuando el entrenamiento no finaliza con
el cross. Si se utiliza como calentamiento inicial en los trabajos
del primer periodo de preparación, no más de 20´.
5) Basket
Por cuanto orienta hacia la
consolidación de la habilidad motora y la coordinación, el
baloncesto está entre los mejores juegos deportivos, también en la
posición "plegada" del cuerpo en defensa del balón, con
las piernas flexionadas, que mal se adapta a un atleta que debe
estar, en carrera, en una posición totalmente distinta. Un partido
de basket conlleva una serie notable de saltos, sprints, cambios de
dirección y de ritmo de carrera repentinos, lanzamientos y gran
coordinación, además de habilidad motora.
Se puede jugar en condiciones
reducidas de 4 contra 4 y esto aumenta la fatiga.
Ejercicio:
20´-
30´; sirven las consideraciones hechas para el fútbol cara a la
realización de los partidos.
A mi modo de ver, estos dos
juegos son los peferibles para un trabajo de resistencia general a la
fatiga, por cuanto son más fácilmente realizables en el gimnasio y,
normalmente, los de más agrado de los atletas.
es muy largo el que escribio esto esta bien loco le falta un tornillo
ResponderEliminares cierto lo que dice ese niño estas bien loco
ResponderEliminarseñor vos es tas loco eto es muy largo para los bambinos
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